En un rincón del partido de Bragado donde el sentido de pertenencia se vive en cada gesto, la localidad de Warnes festejó este jueves sus 118 años de vida. El encuentro tuvo lugar en el SUM que comparten la Escuela Primaria Nº 3 y la Secundaria Nº 7, y reunió a instituciones locales, vecinos y autoridades, en una jornada tan sencilla como sentida.
El acto comenzó con un momento de profundo respeto y emoción: el ingreso de las Banderas de Ceremonia del Jardín de Infantes Nº 908 “Gabriela Mistral”, la Escuela Primaria Nº 3 “Bartolomé Mitre” y la Escuela Secundaria Nº 7. Enseguida, las estrofas del Himno Nacional Argentino llenaron el salón, como cada año, con una fuerza especial, propia de los pueblos donde los vínculos entre las personas lo son todo.
Entre los presentes estuvieron el delegado municipal Héctor Pelefigue, representantes de instituciones fundamentales para la vida diaria del pueblo como la Unidad Sanitaria, los Bomberos Voluntarios de Warnes, el Rotary Club Satélite, la Biblioteca Popular “José Ignacio Warnes”, el Destacamento Policial, la Comisión de la Fiesta del Pueblo y también Bomberos Voluntarios de Bragado, quienes se sumaron a los festejos.
La docente Antonella Barone, de la Escuela Primaria Nº 3, fue la encargada de ofrecer unas palabras alusivas, cargadas de significado y memoria viva, evocando la historia que une a Warnes con sus instituciones educativas, con las familias, con el esfuerzo diario.
Por su parte, el delegado Héctor Pelefigue resaltó con orgullo el compromiso colectivo que ha hecho posible que Warnes crezca sin perder su esencia. Un pueblo donde todos se conocen y trabajan codo a codo, donde las pequeñas acciones cotidianas hacen la diferencia.
También se dirigió a los presentes el secretario de Desarrollo Humano y Productivo, Emmanuel Aramendi, quien agradeció al intendente Sergio Barenghi por “darle a las localidades la importancia que realmente merecen”. Y no dejó de destacar la labor local: “Quiero reconocer el trabajo del delegado, Héctor, y todo el personal, para mantener al pueblo limpio, ordenado y estar a disposición de las necesidades de las vecinas y los vecinos”.
Aramendi hizo un repaso de los avances logrados en el último tiempo: “En Warnes, se ha trabajado mucho en la Unidad Sanitaria para mejorar la atención de la salud de la comunidad” y también subrayó la continuidad del transporte semanal que une a la localidad con Bragado, así como “las obras de mantenimiento en los caminos que se realizan permanentemente”.
La celebración culminó con un desayuno compartido que refleja como pocos el espíritu del lugar: torta casera, chocolate caliente y sonrisas entre vecinos que se saludan por el nombre, que se reconocen como parte de una misma historia. Porque en Warnes, cada aniversario es más que una fecha: es un reencuentro con lo que los une.