Ante declaraciones públicas que realizó a un medio colega la directora del Cementerio, Silvia Cotta, sobre el caso del robo de placas que logró ser esclarecido hace poco tiempo; CUARTO PODER consultó a fuentes oficiales sobre los avances de la investigación. Se aclaró que ninguno de los dos delincuentes había trabajado como empleado municipal, aunque sí uno de ellos había sido contratado por particulares hace mucho tiempo para la construcción o reparación de bóvedas / nicheras.
Esa persona tenía domicilio legal en el Conurbano, aunque la realidad es que estaba viviendo en Bragado. Tanto él como el otro delincuente fueron atrapados in fraganti mientras intentaban robar 76 placas de bronce, lo que equivale a 150 kilos.
Ambos habían sido vistos en el exacto momento en que subían las placas en un vehículo, las cuales fueron arrancadas de distintas bóvedas o nicheras, generando importantes daños.
Grande fue la indignación que generó en las familias damnificadas y en la comunidad en su conjunto ante la profanación de un lugar sagrado y la falta de respeto a quienes allí fueron enterrados, pero también por el gran perjuicio contra el patrimonio histórico que pudo haber significado.
Los dos fueron imputados en una causa penal. Sin embargo, ya fueron liberados debido a que la Justicia les dio la posibilidad de pagar una caución de 50 mil pesos. Lamentable…