Funcionarios de todos los colores políticos manifestaron su intención de elevar la categoría del evento. No obstante, existen motivos que lo impiden.
Por Leonel G. Avila
(Publicado ayer en el Diario La Voz)
Desde hace mucho tiempo, los bragadenses hemos escuchado la promesa de que la actual Fiesta Provincial del Caballo sería elevada a la categoría “nacional”. Lo anunciaron varios funcionarios municipales y otros tantos de la Nación en sus respectivas visitas a nuestra ciudad. Frente a tal expectativa generada, surgen varias preguntas: ¿por qué todavía no se concretó?, ¿es que no quisieron o porque no pudieron?, ¿será que es una frase que sólo busca dejarnos contentos? He aquí algunas respuestas…
La Fiesta Provincial del Caballo es sin lugar a dudas la celebración más importante de toda la agenda local y una de las principales a nivel provincial. Es el momento en el que el partido de Bragado deja de tener sus 41 mil habitantes habituales para adoptar temporalmente a cientos de turistas que llegan de distintos puntos del país e incluso a otros tantos bragadenses que ya no residen en nuestro territorio.
Es sabido que la fiesta posee varias características que bien podrían convertirla en una celebración nacional y no sólo provincial (que no es poco), fundamentalmente porque posee uno de los desfiles criollos más importantes de la Argentina y también debido a su larga extensión de 5 días (primero duró uno solo, luego se extendió a dos, por impulso de Eduardo Gómez se agrandó a tres, luego a cuatro y finalmente al número actual).
Tampoco es menor la larga historia que posee, ya que su primera edición se realizó el domingo 29 de octubre de 1972 cuando un grupo de amigos conformado por Ana María Vaccarezza, Guillermo Goitia, Eduardo Vaccarezza, Tatiana y Joaquín Chas, entre otros, decidieron homenajear al caballo que le dio el nombre a nuestra ciudad y revalorizar las tradiciones. Como es sabido, la buena respuesta de la comunidad hizo que aquellos pioneros decidieran enviarle una carta al entonces intendente Francisco Aristi para que la declarara “municipal”, hecho que finalmente se concretó pero que inmediatamente le quedó chico debido a las expectativas que generó la celebración previo a su real ejecución. Fue así que en septiembre de 1972 la Municipalidad envió una notificación a la Dirección de Turismo de la Provincia solicitándole la declaración de Bragado como sede provincial de la fiesta, cosa que, tras no recibir respuestas, en 1973 derivó en un nuevo Decreto firmado por el intendente Osvaldo Oliveros para mantener firme el pedido. Tanta fue la instancia que mediante la resolución Nº 217 del 23 de mayo de 1974, se declaró “evento de Interés Turístico a la Fiesta Provincial del Caballo”, hecho que derivó en su ascenso a la categoría “provincial”, cosa que el Director de Turismo le notificó al Intendente de Bragado el 3 de junio siguiente.
Visto el notorio crecimiento que tuvo la fiesta a lo largo de sus 45 ediciones, desde hace varios años se hizo fuerte la iniciativa de que sea elevada a la categoría “nacional”. Tal idea ha sido manifestada por varias gestiones municipales de todos los colores políticos, sumándose incluso la promesa de concreción por parte distintos funcionarios nacionales. Un ejemplo es el del ex ministro de Agricultura y ex presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez, quien lo anunció en los años 2010 y 2015. Otro es el del actual ministro de Educación y Deporte de la Nación, Esteban Bullrich, que lo manifestó este año.
¿Por qué es tan difícil lograrlo? Fundamentalmente porque ya existe una Fiesta Nacional del Caballo y, si bien es más chica, nadie quiere asumir el costo político que implicaría impulsar un proyecto que le otorgue tal condición a la de Bragado y se lo quite a la de San Cristóbal (Santa Fe). Según indicó Ana María Vaccarezza, desde los orígenes de nuestra fiesta se pensó convertirla en nacional, cosa que no se concretó debido a que la de San Cristóbal era un poco más antigua (fue impulsada por la Sociedad Rural local en 1968) y porque uno de sus organizadores era Ruiz Saralegui, el mayor proveedor de caballos de la Dirección de Remonta y Veterinaria del Ejército Argentino, cosa que le habría facilitado la designación.
Consultado sobre el tema el actual presidente de la Comisión Organizadora de la Fiesta Provincial del Caballo, Horacio Figuerón, manifestó su deseo de que la celebración pueda acceder a la categoría “nacional”, aunque dijo que lo ve poco probable por el hecho de que ya exista otra. No obstante, indicó que desde Nación le ofrecieron la posibilidad de concretarlo mediante el cambio de nombre de la fiesta, propuesta que fue descartada debido a que significaría una pérdida de la identidad histórica del evento.
¿Alguna vez será Bragado sede de la Fiesta Nacional del Caballo? Por lo pronto todo parece indicar que deberá conformarse con su jerarquía provincial, aunque, como bien indica el dicho popular, “la esperanza es lo último que se pierde”.