Podrá seguir viviendo gracias al órgano que recibió de un donante.
Una vez más ha quedado demostrado que la donación de órganos salva vidas. El pequeño bragadense “Pedrito” Abentín se encuentra reponiéndose del complejo problema de salud que padecía ya que apareció el hígado que necesitaba y fue trasplantado con éxito.
El niño tiene 3 años. A los 6 meses de vida le diagnosticaron una insuficiencia hepática por una malformación del gen X, lo cual generó que su hígado se fuera deteriorando y sólo funcionara en una porción mínima (alrededor de 1/4). Durante mucho tiempo los médicos procuraron que pudiera superarlo, pero una complicación ocurrida en mazo de este año hizo necesario un trasplante urgente a través de un donante pediátrico cadavérico.
“Pedrito” estuvo en Emergencia Nacional y su caso se hizo público debido a la lucha incansable de su familia para tratar de ayudarlo. Su imagen recorrió las redes sociales y también los medios locales.
En lo que respecta a la operación, se extendió alrededor de 7 horas, ya que entró a cirugía a las 9hs de ayer y salió a las 16:15. Desde el primer momento, los médicos destacaron la evolución del niño, cosa que quedó demostrado con la buena noche que pasó hoy y una situación que contó Adriana González: “Abrió los ojitos y me dijo ´mamá’; lo llené de besos”.
Desde su familia agradecen las muestras de afecto y empatía que recibieron todo este tiempo por parte de los bragadenses. Además destacaron que la importancia de las donaciones pediátricas ya que contribuyen a que “se cumplan estos sueños de seguir viviendo”.