Varias son las cuestiones que se pueden analizar sobre el acto de entrega de viviendas que se realizó esta mañana en el barrio Nuevo Horizonte. Claramente lo principal fue el beneficio que obtuvieron 24 familias ya que desde hoy cuentan con su casa propia, pero también ha motivado distintas opiniones la interferencia de la campaña electoral y la disputa política en el evento.
Por un lado, no son pocos los que consideraron fuera de lugar la presencia en el escenario del candidato a intendente de Unión por la Patria, Sergio Barenghi (quien no ocupa ningún cargo público), y más aún el hecho que haya sido uno de los oradores. Desde su espacio lo defendieron argumentando que fue invitado por el gobernador Axel Kicillof.
De todas formas, Barenghi se mostró medido, ya que no intentó confrontar con nadie, pese a que se oían gritos de funcionarios municipales que le decían “callate” o “¿por qué tiene que hablar?”. Le agradeció al Intendente y al Gobernador por permitirle tomar la palabra, e indicó que de aquí en más las políticas públicas deben estar destinadas a que el resto de las personas inscriptas también puedan tener su casa propia, e incluso le pidió al gobierno provincial que se puedan construir 60 casas más en un lote del barrio Agumín, lo cual fue aceptado por el Kicillof.
Quien sí buscó la confrontación constante fue el Gobernador, ya que en forma permanente arremetió contra La Libertad Avanza y Juntos por el Cambio, notándose una gran incomodidad de Vicente Gatica cada vez que cuestionaba a su espacio. En dos oportunidades Kicillof dijo que no quería mezclar cuestiones partidarias, pero terminó haciendo todo lo contrario.
El Gobernador apuntó contra el gobierno de Vidal porque “hicieron muy poquito o nada de viviendas” y lo acusó de haber hecho distinciones en el reparto de fondos, discriminando a los intendentes del Frente de Todos (nombró el caso de Alberti). Además, señaló a Patricia Bullrich como “la que quiere ajustar todo y echar gente, y que no quiere más viviendas en nuestra provincia”.
En cuanto a Javier Milei, Kicillof lo describió como “el que quiere cerrar ministerios y venir con la motosierra”, mostrando una fuerte oposición a todo lo que plantea. También le dedicó un párrafo especial a cuestionar su propuesta de los vouchers para el sistema educativo.
A lo largo del acto hubo varios momentos en que se evidenció una falta de respeto hacia los oradores, notándose también un infantilismo en ambos bandos al momento de ovacionar o aplaudir a quienes hablaban. Los funcionarios municipales se mostraron desaforados para resaltar a Vicente Gatica, pero reticentes a mostrar algún tipo de aplauso a Kicillof o Barenghi; mientras que los concejales y referentes del peronismo hacían lo mismo, pero a la inversa.
MOMENTO DE TENSIÓN ENTRE KICILLOF Y FUNCIONARIOS MUNICIPALES
Tanto de un lado como del otro reconocieron que se vivió un clima tenso, fundamentalmente cuando funcionarios municipales se ofuscaron por lo que decía Kicillof en su discurso y le gritaban cosas para que alagara a Vicente Gatica. “Si quieren lo reconozco al Intendente, pero a Vidal y a Macri no porque hay que decir lo que hicieron: fundieron la provincia y al país, y Bullrich está ahí”, le retrucó el Gobernador.
Kicillof les recriminó que “fue una desubicación un poco fea”, e indicó que todo se debe hacer “con respeto y con la verdad… si -Vidal- hubieran terminado las obras, tendríamos que reconocérselo, pero las dejaron por la mitad”, concluyó.