La Legislatura de la provincia de Buenos Aires sancionó en la noche del jueves la Ley Impositiva 2024, que contempla un aumento de hasta 200% en el impuesto inmobiliario. Para ello, el gobernador Axel Kicillof tuvo que reducir sus pretensiones (inicialmente aspiraba llegar hasta el 300%) y achicar la proyección de gastos en el próximo año de gestión, ya que de lo contrario no obtendría el aval de la oposición para el tratamiento de la Ley Fiscal.
Una de las personas que cumplió un rol en ese tratamiento fue la senadora bragadense Eugenia Gil, quien integra el grupo de legisladores que exigieron modificaciones. “Luego de un arduo trabajo, escuchando, aportando y legislando en beneficio de todos los bonaerenses, llevamos adelante la sesión pensando en el presente y el futuro”, manifestó ese día a través de sus redes sociales.
También adhirió a un comunicado titulado “Kicillof no puede seguir castigando a los bonaerenses”, cuyo texto dice lo siguiente:
“En defensa de los derechos de todos los bonaerenses, los diputados y senadores de UCR + Cambio Federal, PRO y Coalición Cívica, le dijimos NO al aumento desmedido de impuestos que proponía el gobernador Axel Kicillof.
Con el trabajo y la firmeza de los bloques de diputados y senadores de la UCR + Cambio Federal, PRO y Coalición Cívica, y del Foro de Intendentes de Juntos por el Cambio, se redujo el porcentaje de aumento para los impuestos inmobiliario y rural, permitiendo que muchos bonaerenses que tenían que pagar aumentos muy por encima de la inflación ya no tengan que hacerlo. El oficialismo proponía un aumento absurdo del 300% que los bonaerenses ya no tendrán que afrontar.
Por otra parte, se frenó la creación de más estructuras, cargos y nombramientos políticos que se proponía en la Ley de Emergencias.
Los bonaerenses no tienen por qué pagar el descalabro económico del gobierno kirchnerista ni tampoco convalidar, con sus impuestos, la creación de nuevas estructuras que pretenden ser usadas como caja política.
En este contexto tan difícil para la Argentina y la Provincia de Buenos Aires, la dirigencia tiene que estar a la altura de las circunstancias y administrar con responsabilidad y austeridad.
A su vez, tomamos el compromiso de acompañar el pedido de declaración de estado de emergencia, pero con la condición de que la misma sea solo por un año y no un modo de gobernar en la Provincia de Buenos Aires.”